Hoy, 9 de mayo de 2020, es un día especial. Han pasado 70 años de la Declaración Schuman, hito fundacional del convencimiento de que los europeos seríamos más prósperos cooperando entre nosotros, antes que compitiendo. Lo que empezó con una unión económica y de energía es hoy una Unión Europea, de valores compartidos, multicultural y diversa.
Nuestros valores han de ser puestos en práctica para que sean realmente aceptados por toda la ciudadanía europea, y construidos por todos: nuestras instituciones, líderes políticos y la sociedad en su conjunto. Además, es preciso que se articulen institucionalmente y profundizar en ellos, incorporando valores actuales que deberían ser comunes, como la lucha contra el cambio climático.
Se suele decir que el proyecto europeo está bajo amenaza. Esta idea siempre ha planeado, ya sea por miedos o por certezas. Pero los grandes avances en su construcción se han producido siempre como reacción a las crisis. La construcción de la Unión Europea es innovación en un mundo de permanente incertidumbre, también un proyecto joven: 70 años no son nada, en un mundo con estructuras nacionales creadas hace siglos y religiones de miles de años. Las últimas grandes crisis que hemos vivido nos han hecho más fuertes en lo normativo y en solidaridad entre Estados miembro. Tenemos que aprender de cada uno de nuestros errores para que no se vuelvan a repetir, como en la crisis económica de 2008, la crisis migratoria, la salida de Reino Unido, y hoy la pandemia global del Covid-19. Sigamos defendiendo que las vías para solucionar las crisis siguen siendo la cooperación, la solidaridad, y que todos los miembros de la Unión tienen derechos y deberes.
Más retos deberemos enfrentar en los próximos 70 años, y los/as socialistas seguiremos siendo la vanguardia de la construcción europea, asegurando justicia, igualdad y bienestar al mayor número de personas. Enraizados en soluciones concretas y solidaridades de hecho, como anunciaba Schuman, inspirado por Jean Monnet; o en la «Europa de los Trabajadores» que proponía Altiero Spinelli y que hoy conocemos como modelo social europeo. Sin olvidar nunca que el vínculo entre ciudadanía e instituciones es la Europa social, y que es la educación otro de los pilares fundamentales en la creación de una Europa con futuro. Ciudadanos comprometidos con el proyecto común, adaptados y vigilantes en las transformaciones de la globalización y la digitalización, y que valoramos la diversidad como parte de nuestra identidad como europeos.
Sigamos soñando, sigamos trabajando.
Feliz día de Europa
Horacio Diez
PES Madrid
Party of European Socialists